No me falles
-

Introducción

Una historia real e inquietante sobre los hechos acontecidos hace dos años. La cruda realidad hecha pedazos. Con tus comentarios y tus ideas puedes cambiar el curso de la historia. Todo lo que aquí se cuente y ocurra es cierto, tan solo depende de tí , de hasta dónde estés dispuesto a investigar, para saber lo que ocurrió realmente.

--> En la barra roja de arriba podréis seleccionar los capítulos.

--> Dejad vuestra firma en "El libro de visitas" de la derecha, o mandad un mail con vuestras preguntas e ideas, a jsantosagencia@gmail.com


La peor de todas tus pesadillas comienza cuando un error del pasado llega hasta el punto en que termina cuando tus amigos empiezan a morir.

D de Dependencia. - Capítulo 4 ( primera parte)

martes, 18 de noviembre de 2008

Regresé a casa paralizado por mi encuentro con Celia. Su comportamiento, y el hecho de que me agarrara tan fuerte; que intentara pedirme algo; me dejaba sin respiración. ¿Qué cosa tan terrible podría haber sucedido aquel día para que Celia se hubiera transformado en lo que es ahora?. Cuando llegué a mi casa, me di cuenta de que Sofía ya no estaba allí. Había hecho las maletas y se había marchado sin dejar ni rastro. Cuando mi mirada se desvió al teléfono, comprobé que estaba parpadeando la luz roja, y que me indicaba que tenía mensajes nuevos; así que me preparé para escucharlos.

//////////////Primer mensaje, recibido hoy a las 19 horas y 35 minutos.

“Ricardo, soy Sofía. Gracias por dejarme tu casa pero no puedo quedarme por más tiempo allí. Lo único que te voy a pedir es que me perdones; ya entenderás lo que quiero decir con esto. Un beso.”

¿Perdón? , ¿Por qué Sofía me iba a pedir perdón?. ¿Por las supuestas molestias causadas?

//////////////Siguiente mensaje, recibido el día 7 de Septiembre de 2007, a las 21.00 horas

( ¿¿¿7 de Septiembre??? ¡Fue el día en que murieron mis padres!)

“Carmen, soy yo. No tengo tiempo para darte explicaciones. Vístete corriendo que paso a buscarte con el coche. Ahora estar en casa no es seguro. He descubierto dónde está el niño de Albagranera y quién está detrás de todo esto. Te espero abajo en 5 minutos. Un beso.”

El sonido del golpe que dio mi teléfono contra el suelo cuando lo dejé caer, me sacó de mi trance. Mi padre había descubierto todo y ese mismo día se chocó con el coche junto a mi madre. Conocer aquellos hechos, me animaron a seguir los pasos de mi padre y perseguir la verdad, aunque no contara con el apoyo de mis amigos. Total, Joaquín ya se había convertido en todo menos en un amigo.

Aunque esos pensamientos de mi padre y todo lo referente a Jonathan me perturbaban, mantuve la compostura porque no quería sacar el tema y menos en el cumpleaños de Nacho. Cuando César y yo llegamos a la fiesta, las primeras personas que nos encontramos fueron a él y a Cristina. Ella, junto a Joaquín, Celia, Anna y yo, cerraba el círculo del grupo de los 5. Cristina era la más rebelde de nuestro grupo. Entre ella y Joaquín siempre había habido chispa desde pequeños. Estuvieron saliendo juntos, pero lo dejaron para seguir conservando su amistad. Los hechos que ocurrieron el año pasado fueron los cimientos para que surgiera la relación entre Nacho y Cristina, que llevaban ya casi un año de noviazgo. Nacho , en cambio, aunque él y yo nos lleváramos muy bien, este año nos habíamos distanciado más, ya que Nacho sólo tenía tiempo para Cristina. Nada más llegar, ambos me saludaron.

- Nacho: ¡!Campeón!! ¡Cuanto tiempo! ¡!Que ganas de que llegaras...!!
- Cristina: Te hemos echado mucho en falta Ricardo, ¿Cómo estas? – dijo agarrándome las dos manos-
- Ricardo: Bueno... pues bien, más o menos. Estuve viendo a Celia antes y aún me cuesta asimilarlo

Nacho agarró a Cristina por los hombros, como para hacer notar que es su novia, debido a que ella me estaba agarrando. Nacho ante todo era un hombre celoso, por mucho de que se tratara de sus amigos de quién tuviera celos.

- Cristina: - soltándome- Hacemos todo lo posible día a día para que Celia vuelva a hablar, pero todo es inútil
- Ricardo: lo sé, lo sé, pues nada muchas felicidades Nacho, vamos a servirnos alguna copa

¿ Era una percepción mía solo? ¿ O habían ambos ignorado a Cesar por completo?

- ¿ Y tu qué niño? ¿ No te echas ningún ligue?
- Uff, que va que va, hace nada lo deje con mi novio de cuatro años y he tenido mis historias pero no estoy preparado aún para empezar con otra persona, es más a veces me dan ganas de volver con él.
- Cesar... si lo dejaste fue por algo, piénsalo. Segundas partes nunca fueron buenas, aunque yo debería aplicarme el cuento con Anna. Nos hemos visto y he vuelto a sentir amor por ella en tan sólo un momento.

Cesar tragó saliva.

- ¿Anna? ¿ Qué estás diciendo Ricardo? ¿ Cómo puedes plantearte algo con ella?
- No sé, tío. Pero la he visto y he vuelto a sentir por Anna lo que sentía antes, y creo que a ella le ha pasado lo mismo.
- Ricardo, olvídate de Anna. No te va a aportar nada nuevo; menos mal que hoy no viene.
- ¿Qué hoy no viene? – dije mirando hacia adelante- ¿Entonces esa quién es?


Acababan de entrar por la puerta del local , Celia, (agarrada de David) y Anna. La cara de Cesar se descompuso de la sorpresa.

- Cesar me gustaría contarte algo... – desvió su mirada hacia mi – he hablado con David cuando he ido a ver a Celia, y... bueno, no sé que habrá pasado entre vosotros este año , pero... me ha dicho que no confíe en ti, que has cambiado mucho en este último año. Y yo, lógicamente...,a ver tu a mí me has demostrado mucho, no como este gilipollas que ha perdido el norte totalmente.

César se armó de ira y se aproximó a David aún a pesar de que yo intenté evitarlo. Se montó un gran revuelo y las discusiones hicieron que la música de la fiesta quedara aislada.

- ¡TU! ¿ Qué cojones vas diciendo a Ricardo? ¿ que no se puede confiar en mí? Creía que ya habíamos dejado nuestras diferencias a un lado
- ¿ Yo? – David apenas se inmutó- Cesar sabes que te aprecio mogollón, y ya te pedí perdón por todo lo que hice cuando estuve enganchado a la droga. No veo por qué iba a hablar mal de ti, y menos a Ricardo que es amigo de ambos.
- ¡ Eso es mentira!, tu mismo me dijiste esta tarde de que no confiara en Cesar, que había cambiado mucho desde que ocurrió lo de Celia.
- Creo que te estás equivocando Ricardo, quizás como te pusiste tan nervioso al ver a Celia , me mal interpretaste
- ¿ Qué te ocurre conmigo Ricardo? – me preguntó Cesar ofendido- siempre te he apoyado; pensaba que habías venido aquí a pasarlo bien, no a crear mal rollo.
- ¡ Bueno basta! – intervino Nacho- No voy a tolerar un comportamiento así y menos en el día que celebro mi cumpleaños.
- Tranquilo Nacho – respondió Cesar- yo aquí ya no pinto nada.

Y diciendo eso último se largó de la fiesta dejándome con la palabra en la boca. Mi enfado hacia David estaba en punto de ebullición.

- ¿ Qué coño te pasa a ti , David? ¿ De qué vas? – en ese momento nos quedamos solos junto a Celia que estaba agarrada a David-
- Si te advertí de lo de Cesar es por tu bien, no porque yo tenga algún interés en que acabes mal con él. Pero eso sí, no pienso dar lugar a que se cree mal rollo entre el y yo.
- Es muy fácil tirar la piedra y esconder la mano, ¿y sabes qué David?. No eres más que un COBARDE.

Me di la vuelta y continué en la fiesta con el resto de mis amigos. David me había herido como amigo y no sólo eso, había provocado que yo discutiera con mi mejor amigo. Lo que por aquél entonces yo no sabía, es que Cesar no se había ido por el enfrentamiento conmigo y con David. Él se había ido porque odiaba a Anna con todas sus fuerzas y porque lo que ella había hecho era muy difícil de perdonar.

2 comentarios:

yaiza dijo...

ui ui ui esto huele raro....vaya amigos tiene ricardo...

baby jisas dijo...

cesar es gay??

Chat de "No me falles"